sábado, 24 de diciembre de 2016

Tabaré Alonso, cicloturista: “Llegué al paraíso cuando entré en Venezuela”


Tabaré Alonso, cicloturista: “Llegué al paraíso cuando entré en Venezuela”

http://www.analitica.com/tendencia/tabare-alonso-cicloturista-llegue-al-paraiso-cuando-entre-en-venezuela/

Un técnico en sistemas de 28 años que se cansó un día de lo rutinario de su vida y decidió hacer una pausa. Comprensible hasta aquí. La diferencia es que él escogió tomarse ese tiempo pedaleando unos 13.000 kilómetros desde su natal Uruguay hasta la lejana Panamá. Eso definitivamente no lo hace cualquiera.  Esta es la historia de Tabaré Alonso y su viaje en bicicleta por América, con especial énfasis en lo que halló en su paso por Venezuela.

Punto de partida

Una ruptura amorosa le mostró que las certezas son frágiles. La rutina de trabajo le confirmó que el anhelo de apostar por la aventura y la incertidumbre valía la pena y el viejo mapa en el que había ido marcando durante años lugares para visitar, le dio alas al secreto anhelo de realizar “el viaje de sus sueños”, proporcionándole la voluntad necesaria para enfrentar el reto. Un amigo de la infancia radicado en Bogotá le debía un café, así que decidió ir a buscarlo, recorriendo en bicicleta el trecho kilométrico que los separaba.

“No serán vacaciones, sino una aventura diaria donde cada día tendré que ir superando los obstáculos y miedos que vayan presentándose, sumándole el deporte y la vida sana”. Así presentaba Tabaré el proyecto que estaba por iniciar, en la web que creó entonces para ir compartiendo su travesía.

¡Y partió! Salió de su tierra en marzo de 2016 y recorrió Uruguay, Argentina, Bolivia, subiendo hasta Perú y allí, en lo alto de la cordillera de los Andes, se planteó una nueva encrucijada: incluir a Venezuela en el trayecto y conocer el Mar Caribe con el que tanto soñaba… o seguir hacia Colombia por Ecuador, tomando el camino seguro. Era una decisión de 4.000 kilómetros en bicicleta. No podía dudar.

¡No vayas a Venezuela!

Tan pronto comentó en sus redes su intención de visitar Venezuela empezó a recibir advertencias y rogatorios, uno tras otro, que intentaban hacerlo desistir de la idea.

“La gran mayoría era de gente venezolana. ‘Te van a robar, te van a secuestrar’ me decían cada dos por tres. ¡Odiaba que me dijeran eso porque yo sí quería ir!”, relató después  Tabaré a Sumito Estévez, quien lo entrevistó en su programa de radio “El Diario de un Chef”.

A pesar de las advertencias, la decisión estaba tomada: giró hacia Brasil, remontó ríos, llegó hasta Manaos y finalmente se encontró frente a la frontera con Venezuela.
“Incluso el último día antes de cruzar, todavía un chico venezolano me dice: ‘Te recomiendo que no cruces a mi país. Vas a tener que dormir en la copa de los árboles para que no te roben’. ¡Eso me dolió! porque tienes un sueño y no quieres que 99 de 100 personas te digan que lo abandones”, cuenta el ciclista. Pero no había llegado tan lejos para apartarse ahora.

sábado, 10 de diciembre de 2016

Puertas de Miraflores, Estado Monagas



Las "Puerta de Miraflores, son paredes de roca caliza de 150 m. de alto,  situada en el Estado Monagas, dentro del Parque Nacional El Guácharo, dentro del sector Miraflores, a una hora y media aproximadamente de Cumaná por la vía de Cumanacoa - Cocollar; o a unas 2 horas de Maturín, por la misma vía hacia Caripe, atravesando Punta de Mata, el Tejero y luego San Antonio de Capayacuar. Hay que llegar a un caserío llamado "La Puerta de Miraflores".

Para ir en autobús, se debe llegar hasta Maturín, donde se debe tomar otro autobús con destino a San Antonio de Capayacuar. De San Antonio a Las Puertas son unos 30min, se puede ir en carrito (no salen con mucha regularidad) o en taxi.



En Miraflores no hay dispensario, farmacia, ni bancos locales, por lo que se debe ir con todo lo necesario.  En el pequeño poblado existe una posada que cuenta con los servicios básicos y precios accesibles, ésta se encuentra a pocos minutos del cruce del río. También existe la opción de acampar en casa de las señoras Luisa o Noemí. Ellas cuentan con una zona donde se puede estacionar el carro, colocar carpas, colgar la hamaca, además de contar con agua potable y baño (Se debe acordar el costo con las dueñas del lugar). Las señoras pueden cocinar desayuno, almuerzo y cena con muy buena sazón, por un precio muy accesible.


Dato Curioso: Al comienzo del sendero se encuentra el río más pequeño del mundo; llamado río “Mapurite”, el cual nace en una pequeña cascada a los pies del árbol de Matapalos y muere en el río Guarapiche, tras recorrer un total de 13 metros. A pesar de su escasa longitud, sus caudalosas aguas surten a las comunidades venezolanas de Miraflores, Tristé y Campo Alegre.





Los aventureros se abren paso hasta este maravilloso destino entre montañas y pasos de río para vivir una experiencia celestial, rodeados de un paisaje que refresca cualquier ánimo. El caserío es pequeño y está protegido por un gran cañón del que nace un río que serpentea hasta cada casita, bañando y bendiciendo a cada habitante del poblado con sus frías y cristalinas aguas. Aquellos que deciden subir al cañón y purificarse en sus aguas, retornan rejuvenecidos cada vez. 



Por lo tanto, Las Puertas de Miraflores son un destino maravilloso para aquellos con espíritu aventurero que gozan del clima de montaña y del ejercicio al aire libre. Nadie baja de este cañón sin sentirse invencible y renovado. Cada vez que la visite puede descubrir algo nuevo, basta con llevar su mochila y su cámara fotográfica. Puede hacer yoga, rapel o cualquier otro ejercicio. En lo alto del cañón es toda una experiencia religiosa que le ayuda a desligarse de cualquier preocupación y le impulsa a regresar con las mejores energías a casa.






Las piedras desde las que nace la caída de agua principal, en lo alto del cañón, le dan el nombre de “Puertas de Miraflores” al sitio porque simulan una puerta colosal. Hay quienes aseguran que el recorrido no está completo hasta llegar a la parte más alta y sumergirse en las piscinas naturales y los arriesgados practican sus clavados usando de trampolín las grandes piedras del río. Llegar allí es una hazaña, ya que las rocas sirven como control de acceso del privilegiado lugar.


En total son siete pasos de río hasta llegar a Las Puertas, y los lugareños tienen como tradición guiar a los visitantes nuevos y pedirles que caminen mirando al suelo desde el quinto paso de río, hasta que llegan a la parte más alta. Esto lo hacen para que los turistas se sorprenden con la majestuosidad de las piedras y lo hermoso del paisaje. La brisa fría y fuerte emociona más el corazón.







Para ir a la zona de escalada es necesario atravesar 4 veces el río. Se debe tomar el camino señalizado hasta llegar a una caminería de piedra que llega hasta el cañón de roca. La caminata dura aproximadamente unos 35min.


Las paredes cuentan con rutas de estilo deportivo y tradicional de variada dificultad, desde 5.7 hasta 5.13c. Las rutas tienen hasta cuatro largos con alturas desde 20 hasta 160 metros. En estas paredes hay mucha variedad de texturas, coladas, grietas, chimeneas, regletas, entre otras.

Hay aproximadamente unas cincuenta vías distribuidas en 5 sectores: "Las abejas", "Hechizo", "Bolletes", "La Proa" y "Las Deportivas".

Si piensas visitar por primera vez la "Puerta de Miraflores" es recomendable ir acompañado de un amigo o guía que conozca el lugar. Hay gente del pueblo que te puede servir de guía para llegar a la zona de escalada y darte una idea de qué rutas pueden intentar.

La mejor época para ir es desde diciembre hasta marzo, pues no llueve tanto. En temporada de lluvia el río suele crecer bastante y cruzarlo es, en algunas ocasiones, peligroso.




  
  Recomendaciones:




  • Llevar protector solar y repelente.
  • Llevar unas sandalias para cruzar el río.
  • LLevar lentes de sol.
  • Llevar traje de baño y toalla.
  • Si llevas teléfono celular, sólo Movilnet tiene cobertura.
  • Hay un manantial en la zona, por lo que no es necesario llevar agua potable. 
  • Llevar linterna preferiblemente frontal
  • Llevar cuerdas de 60m y cintas express.









  • jueves, 13 de octubre de 2016

    Hacienda Sarrapial, Maturín Estado Monagas


        La Hacienda Sarrapial es una casona típica que es modelo o réplica de la Casa del Libertador Simón Bolívar en Santa Marta, Colombia, que nos recuerda la presencia colonial en el Estado Monagas. De gran belleza escénica, es un punto de referencia desde el punto de vista turístico, recreativo y ambiental. Esta hacienda pertenecía a Don Epaminondas Salazar Serrano, propietario de 530 hectáreas de tierras. Don Epaminondas nació en 1876, sus padres fueron Don Diego Salazar y Doña Virginia Serrano. Acompañado de una gran mujer que llevaba por nombre Doña Leovigilda Revollo de Salazar, esta dama nace el 22 de Octubre de 1874, en San Joaquín Estado Anzoátegui. Sus padres son el General José Pío Rebollo y Juana María Guzmán.



          Esta hacienda está atravesada por una quebrada conocida con el nombre de Las Piñas, enclavada en un área boscosa por la cual transcurre el río del mismo nombre, empleaban alrededor de 1.500 trabajadores, quienes se organizaban en cuadrillas para diversas actividades:
    Cuadrilla de Sarrapia: El cultivo de la Sarrapia constituía la principal actividad de la familia Salazar; de la semilla de este rubro se producían cosméticos, perfumes, remedios farmacéuticos, entre otros.
    Cuadrilla de Aserradero: Para la elaboración de mesas, sillas, puertas y urnas.
    Cuadrillas de Sembradíos de Caña: Estaba encargada de elaborar el ron "Las Piñas", el cual era añejado en barricas dentro de la Hacienda, para ser exportado a diferentes lugares de Europa.



    Cuadrillas Trapiche: Producían la melaza, la que después cocinaban en grandes pailas, para la obtención de las famosas panelas de papelón.

    Trapiche

        Pailas para cocinar la melaza
                                                                        
    Cuadrillas para la siembra y cultivo de Tabaco: Se producían grandes cantidades de tabaco, que eran vendidas en los pasillos de la Hacienda a un costo de 2 Bs. por paca.
    Cuadrillas de fabricación de Tejas y Ladrillos: Estos productos eran usados en la construcción y ampliación de la Hacienda, el excedente se vendía a particulares.
    Cuadrillas de Selección y Siembra de Cereales: Esta actividad era realizada por mujeres y niños quienes recolectaban y clasificaban los granos del frijol, caraotas, maíz  otros.
    Cuadrillas del Saque: En los terrenos de la Hacienda existían saques de arena, granza y piedra picada, materiales utilizados en la construcción de la misma.
    Cuadrillas de Fabricación de Coronas: Bajo la dirección de Doña Leovigilda, se preparaban grandes y hermosos arreglos florales de rosas, claveles y siemprevivas, cuyas flores eran traídas de otros lugares.

    Apicultura: En los jardines de la Hacienda existían un pequeño apiario en el cual se producía miel de excelente calidad.

    Recursos Naturales:
          Actualmente en la Hacienda existen 28 especies de árboles entre ellos tenemos:
    * Sarrapia.                        * Bucare.
    * Cedro.                            * Yagrumo. 
    * Teca.                              * Tapara.
    * Pomalaca.                      * Ceiba.
    * Palma Africana.             * Samán.
    * Lechosa.                         * Jobo.
    * Cambúr.                          * Araguaney.
    * Guayaba.                        * Bijao.


         En la Hacienda Sarrapial funciona la Sede de la Corporación Monaguense de Turismo (CORMOTUR), donde se realizan actividades como:
    * Visitas guiadas.
    * Fiestas sociales.
    * Reuniones, talleres, cursos y conferencias.
    * Disfrute de las instalaciones.
    * Salón de lectura.
    * Planes Vacacionales.












      





















    La Corporación Monaguense de Turismo adscrita a la Gobernación Bolivariana de Monagas, es el ente rector de las políticas turísticas de la entidad, en equilibrio con la acción de las comunidades, en respeto al medio ambiente, en pro del desarrollo y crecimiento socio productivo de la región y la visión de país.

    Dirección: Av. Alirio Ugarte Pelayo, elevado de Boquerón, Hacienda Sarrapial, Maturín, Estado Monagas, Venezuela. Telefax: 0291- 643.07.98 / 643.59.49.








    Poza Cristal, Casanay Estado Sucre